Después de casi dos meses de bloqueo total, comenzó la evacuación de la planta siderúrgica Azovstal de Mariupol, según reveló Svyatoslav Palamar, subcomandante del Regimiento Azov y fuentes locales e internacionales confirmaron el hecho.
Palamar reveló en un video que un grupo de 20 mujeres y niños ya han salido con la esperanza de ser llevados a Zaporiyia, la ciudad a unos 450 kilómetros al noreste. El militar ucraniano dijo que se espera evacuar a todos los civiles de la planta de Azovstal, donde se cree que hay atrapadas 1.000 personas en sus túneles.
Pese al optimismo del subcomandante del Regimiento Azov, el panorama es incierto y depende de las decisiones políticas del Kremlin. Hace instantes salió de Mariupol, un convoy con apenas veinte refugiados. Son mujeres y chicos que pudieron atravesar todos los controles de las tropas rusas en el lugar.
La posibilidad de evacuar -aunque sea una mínima parte de los civiles atrapados en esa línea de fuego-, es el resultado de una compleja negociación que lideró Antonio Guterres, secretario General de Naciones Unidas. Guterres mantuvo un encuentro con Vladimir Putin en Moscú y luego se traslado a Kiev para cerrar un acuerdo muy precario con Volodimir Zelensky, presidente de Ucrania.
Esa forzado acuerdo, condicionado por la mutua desconfianza entre Putin y Zelensky, debió haber iniciado hoy a las 6:00 AM (hora de Ucrania). Pero todo se fue dilatando, y el primer convoy desde Mariupol rumbo a Zaporiyia partió de la zona de combate a las 19:40 (hora de Ucrania).
Las mujeres y niños que escapan de la zona de conflicto fueron rescatados de los escombros, y trasladados a una área neutral para luego subirlos al transporte que llegará a esta ciudad. Mientras se confirmaba la información desde Mariupol, en Zaporiyia.
En esta ciudad ya se ha desplegado un centro de refugiados para asistir a los civiles que empezarán a llegar desde Mariupol. Se prevé asistencia médica, comida, ropa y sitios apropiados para dormir, tras padecer semanas a merced del fuego cruzado y la negligencia del Kremlin respecto a habilitar un corredor humanitario para los civiles.
Sí Putin cumple con sus compromisos diplomáticos, durante el domingo debería llegar a Zaporiyia un convoy de aproximadamente 30 micros con más de 600 civiles -mujeres, niños y ancianos-, que todavía están encerrados en la acería que defiende las tropas de Ucrania frente a la ofensiva de los batallones rusos.
Cuando concluya el operativo de rescate de los civiles de Mariupol, se prevé en esta ciudad que se trasladen funcionarios del Consejo de Derechos Humanos de la ONU para tomar testimonio a los sobrevivientes del sitio que vivieron durante semanas.
Esa información -junto a evidencias fotográficas y documentos reservados- será clave para avanzar en la investigación de los crímenes de lesa humanidad que habrían perpetrado las tropas rusas en el frente de combate.
La Comisión Ad Hoc que tiene esa tarea por pedido de la mayoría de los países del Consejo de DDHH de la ONU, debería elevar su informe en un año. Y los testimonios de los sobrevivientes de Mariupol serán una pieza irremplazable para establecer la responsabilidad criminal de Putin. (INFOBAE)