Un comunicado del Gobierno argentino dijo que la construcción comenzará a fines de 2022 e involucrará la creación de más de 7.000 empleos directos, con una inversión de 8.300 millones de dólares, la mayor de origen chino en el país.
La CNNC dijo en su cuenta de WeChat que la firma del contrato de ingeniería, adquisición y construcción marcaba un importante hito en los lazos nucleares y que ayudaría a las dos naciones a abordar los desafíos del cambio climático de forma conjunta.
Los avances en el acuerdo nuclear entre los dos socios comerciales se habían estancado desde que fueron negociados por primera vez por el Gobierno de la expresidenta Cristina Fernández, quien dejó el cargo en 2015 después de cerrar una serie de acuerdos con China.
El Gobierno argentino explicó que el proyecto involucra la ingeniería, construcción, adquisición, puesta en marcha y entrega de un reactor tipo HPR-1000 que se instalará en la localidad de Lima, en la provincia de Buenos Aires.
«La central de tipo HPR-1000 contará con una vida útil de 60 años y utilizará uranio enriquecido como combustible y agua liviana como refrigerante y moderador», señaló en el comunicado.
Anteriormente, se informó de que el proyecto Atucha III tenía un valor de hasta 8.000 millones de dólares. Los detalles de la financiación del acuerdo no estaban disponibles.
China desarrolló Hualong One, una tecnología de reactor nuclear de agua a presión de tercera generación, para competir con el AP1000, desarrollado por Westinghouse y con la tecnología del reactor presurizado evolutivo (EPR) de Europa.
Además, China ha puesto en marcha su propio reactor Hualong One en la provincia suroriental de Fujian.
El proyecto de Argentina será el segundo emplazamiento en el extranjero que utilice la tecnología Hualong One, después de Pakistán. (Reuters)