El accidente ocurrió ayer por la madrugada a las 3:00 horas aproximadamente. El vehículo, de placa A7D-780, pertenece a la empresa Q´orianka Tours Águila Dorada, y era conducido por Jesús Flores Navarro.
La Policía Nacional del Perú (PNP) llegó al lugar de los hechos para confirmar que hay, al menos 24 fallecidos, la mayoría de nacionalidad haitiana. La Fiscalía debe confirmar cuántos muertos hubo en el accidente; y ya se comunicó a los representantes del Ministerio Público para el levantamiento de los cadáveres.
Al lugar también arribaron serenos y la Compañía de Bomberos para auxiliar a los heridos y sacar los cuerpos de las víctimas.
Los heridos fueron trasladados al centro de salud de El Alto y Máncora mientras que los fallecidos fueron llevados a la morgue de Talara a la espera de ser identificados, sin embargo, este lugar no tiene la capacidad para albergar a tantos muertos.
La compañía Q´orianka Tours Águila Dorada cubría la ruta a la ciudad de Pucallpa, pero debido los bloqueos en el sur del Perú comenzaron a cubrir la ruta del norte.
La Policía investiga las causas del accidente, aunque presume que el conductor del bus interprovincial perdió el control del vehículo en un tramo con pendiente bien pronunciada, conocida como la «curva del diablo», por la oscuridad de la noche.
Muchos de los pasajeros heridos se salieron por las ventanillas del vehículo como consecuencia del accidente, en medio de la desesperación, mientras algunas personas que se encontraban ilesos, también se dedicaron a ayudar en este cometido.
En la agencia de la empresa se presentaron los familiares y otros viajaron al mismo lugar del accidente.
La PNP investiga las causas del accidente y presume que el conductor perdió el control del vehículo en un tramo con pendiente muy pronunciada, donde en anteriores oportunidades también sucedieron hechos similares con pérdidas de vidas humanas.
LA CURVA DEL DIABLO
No es la primera vez que sucede un accidente de esta magnitud en la zona. En 2020, siete personas murieron y 45 resultaron heridas cuando el bus de la empresa interprovincial Divino Niño de Guayaquil, de placa B1Q-968, conducido por José Luís Lloclla Adriancén, se despistó y cayó un abismo.
El vehículo viajaba con más de 50 personas, entre los que se encontraban hinchas del club Barcelona de Guayaquil. La unidad regresaba de Lima, para luego ir a la localidad de Aguas Verdes, en la región Tumbes y continuar hacia Ecuador.
Debido al impacto cinco personas murieron en el acto; otras dos fallecieron minutos después. El resto de pasajeros quedaron heridos en la cuesta y otros entre los fierros retorcidos de la unidad.
En el Perú, una «curva del diablo» es conocida por las carreteras que tienen pendientes muy angostas, donde hay que manejar con cuidado para evitar cualquier accidente. (Infobae).