El cordón de seguridad de mil metros en torno al emplazamiento donde se declaró el jueves el incendio se mantendrá en los próximos días debido a que sigue existiendo un gran peligro de nuevas detonaciones.
Pese a ello, las medidas de extinción y enfriamiento en el lugar de la explosión y en tres puntos adyacentes del bosque de Grunewald están surtiendo efecto, ha indicado desde la capital alemana el portavoz de Bomberos, Thomas Kirstein.
El incendio se produjo en el lugar de la explosión el jueves por la noche. Toneladas de viejas granadas, munición y fuegos artificiales confiscados estaban almacenadas en edificios del lugar.
Se escucharon explosiones y el fuego se extendió por la zona de bosque seco durante el día. El centro de voladura para la destrucción de armas y explosivos existe desde 1950 y ahora es responsabilidad de la policía.
La tarea ahora es garantizar la refrigeración de la zona con agua. Por ello, los bomberos y la policía resolvieron reabrir ayer el tráfico ferroviario local y regional que une las ciudades de Berlín y Potsdam por las vías que se encuentran en el límite de la zona de exclusión.
No se permitirá circular en cambio por la autopista cercana, que discurre paralela a las vías, un poco más cerca de la zona de peligro, y que permanecerá cerrada al menos hasta hoy.
El portavoz de los Bomberos ha avisado que la situación en el lugar de la explosión aún no está controlada. “Por supuesto, existe un enorme peligro”, ha argüido.
Allí se utilizan vehículos blindados y robots para la refrigeración, ya que el viernes se midieron hasta 700 grados. Kirstein no quiso dar ninguna información sobre las nuevas medidas. “Está permanentemente vigilado”, ha declarado.
Susanne Bauer, jefa del Instituto Forense de la Policía de Berlín, ha anunciado también ayer nuevas exploraciones en el lugar de la explosión.
“Vamos a entrar con un vehículo protegido para ver qué hay en el camino principal de la voladura, para luego enviar el robot de extinción allí”. “Entonces se reevaluará la situación”, ha indicado. Bauer, no obstante, no ha brindado información sobre la causa del incendio y las explosiones. “Ahora es una cuestión de seguridad”, ha zanjado. (DPA/EP)