El hecho que ocurrido, quedó grabado por las cámaras de seguridad del lugar, ubicado en Perón al 8100, y donde funcionan Canal 3, Radio 2, Rosario3, FM Vida y Frecuencia Plus.
Con los datos obtenidos, la Policía dio inicio a un rastrillaje para detectar a un Fiat Palio de color rojo desde donde se efectuaron los ocho disparos que impactaron sobre una de las paredes de la oficina lugar en el que cumple sus labores el personal de seguridad.
Poco después, según confirmó la empresa a través de un comunicado, encontraron el automóvil abandonado e incendiado en la zona del barrio Vía Honda.
«TVL vuelve a manifestar su preocupación por este nuevo ataque a un medio de comunicación, lo que sin dudas afecta la libertad de prensa, así como por la situación en general que atraviesa la ciudad de Rosario, donde la violencia impone sus códigos y complica la vida cotidiana de las personas que la habitan», indicó el multimedios.
De esta forma reclamó un pronto esclarecimiento de estos hechos, ya que poner fin a la impunidad es el único camino para terminar con los mismos y ratificó su compromiso de informar en forma fehaciente todo lo que pasa en la región como aporte para modificar una realidad que angustia a la sociedad toda.
OTROS ATAQUES A MEDIOS DE ROSARIO
Por otra parte, el 12 de diciembre denunciaron la primera amenaza frente a TVL. Apenas pasadas las 0.30, un delincuente abrió fuego contra la entrada y dejó un cartel con amenazas hacia líderes de organizaciones narcocriminales.
Al autor lo llevaron en auto hasta el acceso principal a las instalaciones de Canal 3. Cuando el conductor frenó, se bajó con un casco de motociclista. Allí arrojó una hoja escrita a mano y disparó una vez.
El mensaje intimidatorio se refirió a Esteban Alvarado, Claudio «Morocho» Mansilla y los hermanos Alan y Lautaro «Lamparita» Funes. Se trata de jefes de bandas delictivas que ya llevan largo tiempo tras las rejas. Afirmaron que iban a asesinar a un policía todos los días.
En la hoja que dejaron frente a TVL les reclamaron a líderes narco: «Dejen de trabajar con los fiscales y AIC», por la Agencia de Investigación Criminal. También les exigieron que «dejen de batir la cana» y «confinar a los pibes en pabellones chicos». (La Voz).
a todos los medios de la ciudad.