La resolución es parte de una iniciativa presentada por Liechtenstein y se da tras el uso del veto por parte de Rusia en el Consejo de Seguridad, que le exigió su salida de Ucrania, un día después de iniciarse lo que el presidente ruso, Vladimir Putin, calificó como «operación militar especial».
«Juntos nos hemos asegurado hoy de que un veto ya no sea la última palabra en temas de paz y seguridad», celebró la delegación Liechtenstein en Naciones Unidas. La iniciativa ha contado con el visto bueno de otros 83 países.
La medida entrará en vigor de inmediato y otorga, con carácter excepcional, prioridad a los Estados con veto en la lista de oradores del debate posterior de la Asamblea General para que puedan explicar las causa que motivaran recurrir a la votación.
Si bien esta resolución ha logrado salir adelante en el marco de la crisis bélica en Ucrania, el embajador de Liechtenstein ante la ONU, Christian Wenaweser, ha explicado que comenzaron a trabajar en ella hace dos años «debido a la creciente preocupación» de que al Consejo le resultaba «cada vez más difícil» llevar a cabo su trabajo en virtud de la Carta de Naciones Unidas.
«Somos de la opinión de que los miembros en su conjunto deben tener voz cuando el Consejo de Seguridad no pueda actuar, de acuerdo con las funciones y poderes de esta Asamblea reflejados en la Carta», ha defendido Wenaweser para quien el texto es una muestra del «compromiso con el multilateralismo».
«Nunca ha habido una mayor necesidad de multilateralismo efectivo como hoy y nunca ha habido una mayor necesidad de innovación para asegurar el papel central y la voz de Naciones Unidas en este sentido», enfatizó. (Europa Press)