Berlín reaccionó así a los anuncios de esta semana del gigante ruso Gazprom sobre la reducción de entregas de gas a través del gasoducto Nord Stream, en el contexto de la guerra en Ucrania y el pulso energético entre los países occidentales y Moscú.
«Se tiene que usar menos gas para producir electricidad. En su lugar, se deberán utilizar más las centrales de carbón», declaró el ministerio de Economía en un comunicado.(DW Alemania)