En el marco de una visita a Kiev, Schulze ha remarcado que la ayuda para este fin debe entregarse de inmediato y “no se debe esperar hasta que termine la guerra”. “Debemos comenzar a ayudar y reconstruir ahora”, ha dicho.
“Los ucranianos necesitan agua y electricidad. Aquellos que han huido dentro de Ucrania necesitan un techo sobre sus cabezas, los niños necesitan poder volver a la escuela y se necesita apoyo para todo esto”, ha dicho.
Por otro lado, Schulze ha pedido al presidente de Rusia, Vladimir Putin, que posibilite los envíos de cereales a través de los puertos ucranianos, y le ha culpabilizado del hecho de que “en muchos países posiblemente se produzcan catástrofes a causa del hambre”.
En este sentido, ha trasladado ante los medios de comunicación que Alemania ya ha aprobado unos 185 millones de euros para ayuda de emergencia con destino a Ucrania, especialmente para construir nuevas viviendas e infraestructura energética, como líneas de luz.
Schulze, quien con esta visita se convierte en la segunda integrante del Gobierno alemán en viajar a Ucrania desde el estallido de la guerra el 24 de febrero, ha rechazado las acusaciones rusas según las cuales las sanciones occidentales provocan una crisis global de hambre y ha recordado que los alimentos están excluidos de los paquetes de medidas punitivas.
“Lo que Putin hace de hecho es que bombardea los puertos y de esta manera impide directamente que los alimentos puedan ser exportados desde Ucrania”, ha señalado, antes de reclamar a Rusia que ponga fin a estas operaciones, después de que Moscú haya sostenido que el levantamiento parcial de las sanciones occidentales sería una condición para la resolución de la crisis global de alimentos. (DPA/EP)