Ciudad de México.- Miles de féminas se manifestaron contra la violencia en México en el Día Internacional de la Mujer, donde se reportan 10 feminicidios diarios.
Cifras oficiales indican que el año pasado se registró 969 feminicidios, 949 en 2020 y 947 en 2019.
El presidente Andrés Manuel López Obrador llamaba a protestar en paz y hacerse eco de quienes advertían que las marchas podrían ser violentas.
Desde hace varios días el histórico Palacio Nacional, sede del Gobierno y donde vive el mandatario con su familia, está protegido en toda su periferia por grandes vallas metálicas, las cuáles también han sido erigidas en monumentos y edificaciones importantes.
Pero desde la noche del pasado lunes, un “México Feminicida” fue escrito en letras blancas sobre las láminas metálicas del frente del Palacio, que da la cara al imponente Zócalo capitalino, a plaza central a donde llegan las protestas de la populosa Ciudad de México.
“Mujeres unidas, jamás serán vencidas”, “Mujer callada, jamás será escuchada” coreaba un grupo de manifestantes que llegaba a la explanada hacia el final de la mañana del martes, ondeando banderas blancas.
“Marcharé porque duele que cada día maten a 10 mujeres en nuestro país y aunque me siento privilegiada porque vivo en una zona segura nadie me garantiza que un día pueda desaparecer (…) y aparecer en un terreno baldío muerta, violada”, manifestó al borde del llanto Frida Moreno, una estudiante de 21 años.
“Entiendo que hay personas que tienen suficientes motivos par rayar, quemar y romper cosas”, agregó la joven quien confesó que quedó marcada por experiencias traumáticas con maestros abusivos en su adolescencia. “Me siento con la obligación de ir a marchar para que las niñas no tengan que pasar por lo mismo”, agregó.
López Obrador señaló que bajo su gestión se han hecho avances para defender los derechos de las mujeres, pero sus críticos aseguran que ha sido poco empático con casos de feminicidios y violencia de género y que al final todo lo lleva al terreno político sobre quiénes son sus enemigos y sus aliados.
En su conferencia de prensa matutina del martes, cuando fue consultado sobre si las protestas de la jornada podrían ser violentas, como auguró el lunes un funcionario de la capital, él asintió. “Hay infiltración en el movimiento feminista en general de grupos conservadores”.
López Obrador dijo que le resulta paradójico que los más “retrógrados” se “conviertan en feministas con el propósito de dañarnos, de afectarnos. Quieren mostrar que hay inestabilidad política”.
“Las protestas por los feminicidios, todo eso es un derecho, es la libertad. Lo que está mal es utilizar la violencia con propósitos politiqueros, valiéndose de una causa justa”, agregó el gobernante de 68 años y quien asumió a fines del 2018.
El mandatario ha estado bajo una lluvia de críticas en las últimas semanas cuestionado sobre el nivel de vida y el presunto conflicto de interés de uno de sus hijos por la renta de una lujosa casa en Houston de un exempleado de una empresa estadounidense que tienen contratos con la estatal Pemex.
López Obrador negó las acusaciones, ha defendido a su hijo y ha arremetido reiteradamente en contra de periodistas que han investigado y publicado sobre el caso, acusándolos de estar vinculados y hasta ser pagados por sus adversarios, lo que ha desatado críticas sobre su respeto a la libertad de prensa. (Reuters)