El balance de muertos a causa de los bombardeos del Ejército de Israel contra la Franja de Gaza tras los ataques ejecutados el 7 de octubre por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) subieron a más de 8.500, según indicaron ayer las autoridades del enclave palestino, controlado por el grupo islamista.

El portavoz del Ministerio de Sanidad gazatí, Ashraf al Qidra, indicó que hasta el momento se confirmó la muerte de 8.525 palestinos a causa de los ataques de Israel, una cifra que incluye a 3.542 niños, según un comunicado.

De esta manera especificó que durante las últimas 24 horas se registraron 216 «mártires» en «18 masacres» cometidas por «la ocupación israelí». «La mayoría son desplazados en el sur de la Franja de Gaza, que la ocupación describe como una zona segura», denunció.

Al Qidra, recalcó que los bombardeos dejaron además 21.543 heridos y aseguró que las autoridades recibieron 2.000 informes sobre desaparecidos bajo los escombros, entre ellos 1.100 niños, por lo que se teme que la cifra de fallecidos sea mucho más alta.

«Las violaciones israelíes contra el sistema sanitario causaron la muerte de 130 trabajadores sanitarios y la destrucción de 25 ambulancias», manifestó, a tiempo de acusar a Israel de atacar de forma deliberada 57 instalaciones médicas, dejando 15 hospitales y 32 centros de salud, fuera de servicio por ataques o falta de combustible.

En esta línea, señaló que está claro que la ocupación israelí, que sigue amenazando el Hospital de Amistad Turco sin que se hayan adoptado medidas disuasorias contra ella, considera esto como una ‹luz verde› y destruyó partes del hospital con sus bombardeos.

Al Qidra puntualizó, además que «el Ejército de Israel lleva a cabo ataques en los alrededores del Hospital Al Quds y el Hospital Indonesia, lo que pone en peligro la vida de heridos, pacientes, trabajadores médicos y desplazados», por lo que solicitó a instituciones humanitaria, que protejan el sistema sanitario gazatí.

Asimismo, alertó de que los generadores en los hospitales de Al Shifa, el más importante en la Franja, y de Indonesia podrían dejar de funcionar durante la jornada de hoy a causa de la falta de combustible.

«Pedimos a las partes intervenciones urgentes para ayudar al sistema sanitario con combustible, medicinas y productos médicos para poder retomar sus funciones y salvar la vida de miles de heridos y enfermos», advirtió al Qiadra, quien dijo además a Egipto la apertura total del paso de Rafá para la entrega de suministros y la evacuación de pacientes.

Por último, reclamó limitar el empeoramiento del desastre sanitario entre cientos de miles de desplazados por la propagación de epidemia y solicitó al Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) la entrega de grandes cantidades de sangre para poder llevar a cabo las transfusiones necesarias, para las que ha pedido además a la población que acuda inmediatamente a donar sangre.

Los bombardeos, que se vieron seguido por operaciones terrestres durante los últimos días, fueron desencadenados por los ataques de Hamás, que dejaron cerca de 1.400 muertos y más de 240 secuestrados. Por su parte, la Autoridad Palestina, señaló que más de 110 palestinos murieron a manos del Ejército de Israel o en ataques por parte de colonos desde el 7 de octubre. (Europa Press)