La Policía Judicial de Portugal incautó ayer más de 6,5 toneladas de cocaína, procedente de Latinoamérica, en una operación en el centro de país que acabó con tres portugueses detenidos. La prensa portuguesa cifra en 195 millones de euros, el valor de la droga y lo considera, la mayor aprehensión del año. Se incautaron además de varios coches de alta gama y documentación importante para la investigación, que sigue en marcha.
El cuerpo policial explicó en un comunicado que, en una acción coordinada con la Autoridad Tributaria de Portugal, la semana pasada decomisó alrededor de 3.600 kilogramos de cocaína que llegó al país por vía marítima. La PJ, que no precisó el país de procedencia de la droga aunque sí que venía de América Latina, indicó que la mercancía estaba escondida en envases de harina de soja que entraron en Portugal unos días antes por mar, momento en el que se detuvo a los tres sospechosos de formar parte de la organización criminal transnacional, dedicada a introducir grandes cantidades de cocaína en Europa.
Las autoridades portuguesas señalaron que en el marco de esta misma investigación el pasado mes de junio decomisaron otros 2.952 kilogramos de droga en un almacén en Lisboa, oculta en contenedores de fruta importados legalmente de Latinoamérica por una empresa ajena a la trama. La Policía portuguesa precisó que la operación “Tártaro”, dirigida por el Departamento Central de Investigación y Acción Penal, evitó la elaboración de más de 65 millones de dosis individuales de cocaína.
OTRO CARGAMENTO
DESCUBIERTO EN ESPAÑA
Los servicios españoles de vigilancia aduanera y tributaria intervinieron también ayer en el puerto de Algeciras, al sur del país, una tonelada de cocaína oculta en un contenedor con piñas procedentes de Panamá.
En un comunicado, el Ministerio de Hacienda explicó que la operación comenzó cuando los equipos de investigación controlaban con escáner varios contenedores y vieron una imagen que no se correspondía con la mercancía declarada en uno de ellos. En concreto, se trataba de uno procedente de Panamá que tenía como carga legal declarada el transporte de piñas. La cocaína intervenida pesaba 1.086 kilos, que en el mercado de la droga habría alcanzado un valor de casi 33 millones de euros, detalla la nota informativa. Recientemente se desmanteló en el país una red que introducía cocaína en Europa desde Bolivia.
Por otro lado, la Fiscalía holandesa informó ayer de la extradición desde Colombia de un ciudadano colombiano de 44 años conocido como “Sodapuppy” y acusado de coordinar en Europa la distribución de cocaína y metanfetaminas en nombre de los cárteles de la droga mexicanos. La Fiscalía de La Haya señaló que se trata de un “actor importante” en una operación internacional de tráfico de drogas y lavado de dinero. Está previsto que comparezca el lunes ante el juez. (Dw, Efe, Cmjornal y Dpa)