Caputo se desempeñó previamente como ministro de Finanzas, desde enero de 2017 a septiembre de 2018 en el Gobierno de Mauricio Macri, y como presidente del Banco Central de la República de Argentina, hasta el año 2018.
Este no es el único nombramiento confirmado en las últimas horas. A última hora del martes, la oficina del presidente informaba que Eduardo Rodríguez Chirillo asumirá el cargo de ministro de Energía, en un Gobierno con pocos nombres y en el que ya son prácticamente todos conocidos.
Bajo las órdenes de Milei, Caputo sucederá en el cargo a Sergio Massa, que se desempeñó como ministro de Economía de Argentina desde agosto de 2022 en el Gobierno saliente de Alberto Fernández y posteriormente, fue el rival de Milei en las últimas elecciones presidenciales.
REUNIÓN CON EL FMI
Milei confirmó esta designación en una entrevista radiofónica ayer, en la que comentó su viaje a Estados Unidos de los últimos días, durante el que tuvo la oportunidad de reunirse con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Tras este encuentro, en el que también participó el jefe de gabinete de Milei, Nicolás Posse, el presidente electo comentó que el organismo «comprende a la perfección» el desafío económico al que se enfrenta Argentina y señaló que culmina su viaje con excelentes resultados en este asunto.
Entre los retos del próximo ministro de Economía se encuentran precisamente las negociaciones con el FMI, con quien debe reagendar el pago de deuda, al tener un intenso calendario de vencimientos en las próximas semanas.
Además, Caputo deberá poner en marcha medidas para contener la galopante inflación que sufre Argentina, del 142,7% interanual según cifras de octubre. La recesión prevista tanto al cierre de 2023 como en 2024 y las altas cifras de pobreza son otros de los problemas económicos para el nuevo ministro.
En este sentido, la directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva, aseguró a Milei en una conversación en los últimos días que el Fondo está comprometido a apoyar los esfuerzos para reducir de manera duradera la inflación, mejorar las finanzas públicas y aumentar el crecimiento liderado por el sector privado. (Europa Press)