A primeras horas de ayer, un periodista de la AFP informó de potentes ataques aéreos sobre la ciudad de Khan Younis, nuevo epicentro de la guerra ubicado en el extremo sur de La Franja de Gaza.
La Yihad Islámica, el segundo movimiento islamista armado en Gaza, reportó violentos combates en una zona de la ciudad de Gaza donde sostiene que uno de sus combatientes hizo estallar una casa en la que soldados israelíes buscaban la boca de un túnel subterráneo.
El ejército israelí informó ayer que hubo lanzamientos de cohetes desde Gaza y “feroces combates” en barrios de ciudad de Gaza y en Khan Younis, donde combatientes palestinos “emergieron de los túneles”, “poseían explosivos” y dispararon “lanzacohetes”.
También ayer ejército israelí precisó que 101 soldados murieron desde la ofensiva terrestre en curso en La Franja de Gaza.
“Ríndanse ahora”
El anuncio israelí de intensificar los combates se da cuando el balance de muertos sigue aumentando en Gaza, donde según las últimas cifras del ministerio de Salud de Hamás fallecieron al menos más de 18.000 personas, en su mayoría mujeres y menores.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, pidió a los combatientes de Hamás que depongan las armas, y afirmó que se registraron muchas rendiciones en los últimos días que anuncian “el inicio del fin” del movimiento islamista palestino.
“Deponen las armas y se entregan a nuestros soldados heroicos. Eso tomará tiempo. La guerra continúa, pero es el comienzo del fin de Hamás”, declaró Netanyahu, citado en un comunicado.
“Le digo a los terroristas de Hamás: ‘Se acabó, ríndanse ahora’”, afirmó.
Israel prometió erradicar a Hamás tras los ataques sin precedentes del 7 de octubre, cuando los milicianos de ese grupo traspasaron la frontera y mataron a unas 1.200 personas y secuestraron a unas 240, según las autoridades israelíes.
Unos 138 rehenes continúan en Gaza, dijo Israel el sábado.
Hamás aseguró que ninguno de ellos saldrá “vivo” de Gaza “sin un intercambio y una negociación, y sin cumplir las exigencias” del movimiento islamista, que gobierna el territorio palestino.
Catar, principal mediador entre las dos partes, aseguró que los esfuerzos por un nuevo alto el fuego y más liberaciones de rehenes “continúan”, pero advirtió que los bombardeos israelíes están “reduciendo” las posibilidades.
“IMPACTO CATASTRÓFICO”
La Asamblea General de la ONU anunció que mañana sostendrá una reunión especial sobre el tema Gaza, exigida por los representantes de la organización de la cooperación islámica y del grupo árabe, precisó el portavoz de la presidencia de la Asamblea en un correo electrónico.
Según fuentes diplomáticas, de la reunión podría resultar un pronunciamiento escrito. El proyecto de texto, señala la retoma en gran parte la resolución para pedir un alto al fuego que fue vetada el viernes por Estados Unidos en el Consejo de Seguridad.
El secretario general de la ONU, António Guterres, advirtió que “la situación evoluciona rápidamente hacia una catástrofe” que podría tener consecuencias “irreversibles para los palestinos” y para la región.
La intensificación de los combates terrestres y los ataques aéreos en Gaza hace temer cada vez más por la población civil, que intenta desesperadamente protegerse en el territorio asediado.
Cerca de 1,9 millones de los 2,4 millones de habitantes de Gaza fueron desplazados, casi un millón de ellos niños, según el organismo de la ONU para la infancia.
El director de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, declaró que “el impacto del conflicto en la salud es catastrófico”, y advirtió que el sistema de salud está “de rodillas y colapsando”. (Infobae/Afp)