Al menos 116 personas murieron aplastadas por la muchedumbre durante una manifestación religiosa hindú en el norte de India, con más de 150 heridos, hospitalizados en diferentes nosocomios.
“Se realizaba un evento religioso en la aldea de Mughalgarhi del distrito de Hathras cuando se produjo la estampida. Hasta el momento se tiene 27 cadáveres en el Hospital de Etah, de los cuales 23 son mujeres”, dijo el superintendente de Policía del distrito, Rajesh Kumar.
El director del hospital, Umesh Kumar Tripathi, agregó que habían recibido a “muchos heridos” por el incidente, que según las autoridades ya está bajo investigación.
Más de 150 personas fueron hospitalizadas tras el hecho ocurrido en un pueblo del distrito de Hathras, en Uttar Pradesh, según informó el funcionario médico. Agregó que el número de muertos podría aumentar.
La estampida se produjo cuando los asistentes se apresuraban a abandonar un evento con el líder religioso Bhole Baba, según reportó la prensa local. El evento era una ceremonia religiosa conocida como “satsang”, indicó Tripathi, organizado por lo general por un gurú para la oración colectiva.
Según un testigo citado por la agencia india PTI, la estampida se produjo al término de la ceremonia cuando la gente comenzó a abandonar el recinto y varios de ellos tropezaron con una zanja situada antes de la carretera, lo que provocó una caída en cadena.
La Policía sostuvo que la estampida se produjo debido al hacinamiento, pero no especificó cuánta gente participaba en el acto.
El primer ministro de la India, Narendra Modi, expresó ayer sus condolencias desde el Parlamento de la India, donde realizaba una extensa intervención en el momento en que fue informado del accidente.
El incidente se produjo a unos 350 kilómetros (217 millas) al suroeste de la capital del estado, Lucknow.
Las avalanchas y estampidas son un fenómeno frecuente en las celebraciones religiosas indias y se deben en gran parte a las deficiencias en la gestión de las concentraciones multitudinarias o a la precariedad de las infraestructuras que rodean los lugares de culto.
La peor tragedia de los últimos años sucedió en enero de 2011 en el estado meridional de Kerala, donde 102 fieles perdieron la vida en una zona boscosa y montañosa que conducía a un templo de difícil acceso. (Infobae/Afp/Efe/Ap)