Israel recuerda que no habrá alto al fuego: solo declarará corredores puntuales para el reparto de dosis y “zonas seguras” para vacunar.
Las organizaciones humanitarias emprenden desde ayer en Gaza, una campaña masiva para vacunar contra la polio a más de 640.000 niños del enclave, en doce días con el reparto en tres fases de 1,3 millones de dosis en medio de una guerra.
Aunque la iniciativa en realidad comenzó el sábado con la administración de una docena de vacunas a los bebés del hospital de Nasser, en la ciudad gazatí de Jan Yunis, en el sur del enclave, fue el domingo cuando empezó el despliegue de los suministros a gran escala.
“Los niños de Gaza”, declaró el secretario general de la Organización Mundial de la Salud, Tedros Adhanom Ghebreyesus, “han comenzado a recibir ayer las vacunas que tanto necesitan pero, en último término, la mejor vacuna para estos niños es la paz”.
Primero, la campaña se desarrollará hasta el próximo día 4 en el centro de Gaza. A partir del 5 de septiembre regresará a Jan Yunis y al resto de zonas del sur del enclave, hasta el 9 de septiembre. Los cuatro últimos días de septiembre quedan reservados para completar la iniciativa en ciudad de Gaza y el norte de la Franja.
La campaña, abanderada por la ONU, fue decidida tras el hallazgo, en junio, de este virus en muestras de aguas residuales de la Franja de Gaza, después de meses de bombardeos israelíes contra el enclave en el marco de la guerra contra Hamás. Desde entonces, un bebé se convirtió en la primera persona de Gaza, en 25 años, a la que se le diagnóstica polio.
El movimiento islamista Hamás, que controla las instituciones del enclave, responsabilizó directamente a la ofensiva israelí de “fomentar las condiciones” para la aparición de la polio, al destruir de manera deliberada las infraestructuras sanitarias de Gaza. Israel, por contra, acusa a Hamás de ser el responsable directo de esta crisis sanitaria al refugiarse en centros médicos y puntos vitales para la población del enclave.
Ante la posibilidad de que esta campaña implicara una reducción de las hostilidades, el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, fue tajante al declarar que “cualquier información sobre un alto el fuego para repartir las vacunas es falsa”.
En su lugar, “Israel solo permitirá la apertura de un corredor humanitario para los agentes de transporte y establecerá zonas seguras para el reparto de las vacunas durante unas pocas horas”.
El primer ministro valoró de todas formas la campaña como una “medida importante para impedir el estallido de un brote de polio en Gaza, con el objetivo también de impedir su expansión en la región entera” o, en otras palabras, que no llegue a Israel. (Europa Press)