Las Fuerzas Armadas de Corea del Sur informaron ayer que un submarino estadounidense de propulsión nuclear, llegó a la ciudad portuaria de Busán (Corea del Sur), en un contexto de creciente tensión ante las amenazas balísiticas de Corea del Norte.
La Armada surcoreana señaló que la embarcación, el “USS Vermont”, ya atracó en el puerto con el objetivo de «permitir el descanso de su tripulación y realizar labores de reaprovisionamiento» para reanudar cuanto antes su travesía.
El submarino llegó a la base de Busán, situada a unos 320 kilómetros de Seúl, la capital del país, tras finalizar una serie de maniobras militares en la región. Ahora, la Armada afirmó que está previsto que las partes realicen actividades conjuntas en el marco de unas relaciones «amistosas», según informaciones de la agencia surcoreana de noticias Yonhap.
Estados Unidos y Corea del Sur tratan de apuntalar una estrategia nuclear conjunta concebida ante la amenaza del programa atómico norcoreano y que incluye la concepción de un sistema de intercambio de información sobre cuestiones nucleares, el establecimiento de un nuevo sistema de seguridad o la formulación de procedimientos de consulta «de alto nivel y en tiempo real».
Corea del Norte, por su parte, defendió que su programa se fundamenta en cuestiones puramente «defensivas» y condenó las maniobras de Corea del Sur y la presencia militar de otros países en la península de Corea por considerar que se trata de una provocación cuyo objetivo último de desencadenar una guerra a gran escala en la zona.
Ayer, el Gobierno surcoreano alertó de que Corea del Norte podría estar preparando un nuevo ensayo nuclear «en cualquier momento» de cara a las elecciones presidenciales previstas para el próximo mes de noviembre en Estados Unidos. Así lo señaló el asesor de Seguridad Nacional de Seúl, Shin Won Sik, que sostuvo que se trataría de la séptima maniobra de este tipo por parte de Pyongyang.
«La fecha exacta se decidirá en base a las ventajas y desventajas estratégicas de Corea del Norte, y creo que esta cuestión incluye también el contexto de las elecciones presidenciales en Estados Unidos», sostuvo.
Shin explicó así que tanto Estados Unidos como Corea del Sur consideran esta cuestión una «prioridad principal» en materia de seguridad, por lo que permanecer alerta a cualquier cambio. (Europa Press)