El balance de muertos a causa de los bombardeos ejecutados por el Ejército de Israel contra la Franja de Gaza a raíz de los ataques por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) subió a casi 3.800, según indicaron ayer las autoridades gazatíes.
El Ministerio de Sanidad del enclave, controlado por Hamás, ha especificado en un mensaje en su cuenta de la red social Facebook que 3.785 personas, entre ellas 1.524 niños murieron y unas 12.500 resultaron heridas, incluidos cerca de 4.000 menores a causa de los ataques israelíes en respuesta a la ofensiva de Hamás, que dejó cerca de 1.400 muertos y más de 200 secuestrados.
“La ocupación israelí sigue cometiendo más masacres, exterminando a familias palestinas y destruyendo barrios residenciales e infraestructuras”, dijo, antes de acusar a Israel de socavar los esfuerzos de los equipos médicos para evacuar a los heridos a causa de los ataques.
En este sentido, detalló que las violaciones israelíes contra el sistema sanitario causaron la muerte de 44 trabajadores sanitarios, así como otros 77 heridos y agregó que la ocupación israelí atacó de forma deliberada 23 ambulancias.
Asimismo, la cartera confirmó que fueron suspendido los trabajos en catorce centros sanitarios, situados en el norte de la Franja a causa de la falta de electricidad y el gasto de todas las reservas de combustible, mientras que otros cuatro quedaron fuera de servicio por ataques directos.
Los hospitales de la Franja de Gaza hacen frente a una alta ocupación de camas que supera el 150 por ciento, por lo que los pacientes están durmiendo en el suelo y en los pasillos de los departamentos, sostuvieron.
Poco antes, el Ministerio de Sanidad dependiente de la Autoridad palestina había indicado en su cuenta en Telegram que otros 69 palestinos murieron y 1.300 resultaron heridos en enfrentamientos con las fuerzas de seguridad israelíes en Cisjordania.
El portavoz del Ministerio de Sanidad gazatí, Ashraf al Qidra, denunció que las sucesivas masacres por parte de la ocupación israelí constituyen limpieza étnica en la Franja de Gaza, tal y como recoge el diario palestino ‹Filastin›, vinculado a Hamás.
Asimismo, recalcó que los ataques por parte del Ejército de Israel contra instalaciones médicas en el enclave, controlado por el grupo islamista, incluida la indescriptible masacre en el hospital Al Ahli, que dejó más de 470 muertos, suponen una grave amenaza al sistema sanitario.
Hamás y la Autoridad Palestina, acusaron a Israel de bombardear el hospital en el que había miles de pacientes, familiares y refugiados, mientras que Israel dijo que el centro fue alcanzado por un proyectil disparado por Yihad Islámica.
Naciones Unidas y diversas ONGs, alertaron del ahondamiento de la crisis humanitaria en Gaza a causa del cerco total impuesto por Israel, afirmó que permitirá la entrada de ayuda humanitaria a la Franja desde Egipto.
Sin embargo, la oficina del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, advirtió de que romperá su compromiso si estos bienes llegan a manos de Hamás. Egipto confirmó horas después, un acuerdo para abrir el paso de Rafá para enviar ayuda humanitaria al enclave palestino. (Europa Press)