Las autoridades de Japón informaron ayer de la suspensión de todos los vuelos del aeropuerto de la ciudad de Miyazaki, tras explotar una bomba estadounidense de la Segunda Guerra Mundial en las inmediaciones de la terminal, un incidente que no reportó ni víctimas, ni heridos.
El Ministerio de Transporte japonés confirmó en un comunicado la explosión de una bomba que había sido detectada en el pasado y cuyos restos fueron retirados por efectivos de las Fuerzas Armadas.
La explosión tuvo lugar a unos 100 metros del edificio de la terminal del aeropuerto sobre las 08.00 de la mañana (hora local), cuando el Cuerpo de Bomberos recibió un aviso alertando de que había humo en la zona. Poco después, los bomberos constataron la presencia de un agujero de unos 7 metros de longitud, cuatro metros de ancho y un metro de profundidad.
Se estima que la bomba, de fabricación estadounidense, pesaba unos 227 kilogramos, si bien por el momento se desconocen las causas de la explosión. La pista de aterrizaje se encuentra cerrada, lo que afectó hasta el momento de un total de 87 vuelos.
El aeropuerto de Miyazaki se construyó en 1943 como base del Ejército del imperio japonés y se utilizó para el despegue de decenas de misiones suicidas con pilotos kamikazes. (Europa Press)