El histórico resultado comenzó a gestarse a los 25 minutos del encuentro, cuando Djasur Yakhshibaev apareció solo a segundo poste para rematar de cabeza un centro de Cristiano Da Silva, abriendo el marcador y dejando mundo al Bernabéu. Ya en la parte complementaria, Vinicius se convirtió en una pesadilla para la zaga visitante y consiguió provocar un penal a los 65 minutos, mismo que fue aprovechado por Karim Benzema para igualar el encuentro y superar a Raúl González como uno de los máximos goleadores de la Champions. Fue hasta los 89 minutos cuando Adama Traoré habilitó a Sebastien Thill, quien no lo pensó dos veces e impactó el balón de volea, mandándolo a guardar en el ángulo superior derecho del arco de Thibaut Courtois, consiguiendo un auténtico golazo y un triunfo histórico para el equipo de Tiraspol.