«Hablamos con la dirigencia sobre la realidad de las habilitaciones, si se llegaría a afrontar con los jugadores que venían jugando cada uno tomará una decisión más personal, porque tampoco podemos seguir en esta situación», declaró Jorge Áñez a un día de abrirse el libro de pases en el período corto y con San José sin levantar la sanción FIFA para habilitar nuevos jugadores.
Bueno no pudo pagar a la fecha ninguna de las deudas, cuyo monto llega a un millón, 600 mil dólares aproximadamente con 21 casos. La dirigencia informó que de ocho casos que inhabilitaban subieron a 21 resultando imposible resolver en corto ni en largo plazo.
«Hay incertidumbre acerca de San José, si no aparecen personas para ayudar descenderá, nadie quiere eso, todos quieren que San José vuelva a sus días de gloria y de grandeza, pero tenemos la fe y esperanza de que nos puedan habilitar, sino apoyar a los chicos que puedan jugar», declaró el volante brasileño Thiago dos Santos, quien llegó el mes pasado con la promesa de ser habilitado.
Dentro de la documentación recopilada por la dirigencia se encontraron con papeles aparentemente fraguados en los montos y firmas; en otros casos, hubo intransigencia de los futbolistas extranjeros y nacionales para llegar a un pago por cuotas y pedían el mismo trato de sus compañeros porque eran representados por el mismo abogado.
El club, por otro lado, adeuda dos meses y el 40 por ciento de un sueldo al actual plantel, ese monto será cubierto con el desembolso por los derechos de televisación como indica el compromiso entre Bueno y los futbolistas.