El basquetbolista Joshua Reaves llegó la mañana del miércoles a Cochabamba para sumarse a los entrenamientos del seleccionado, de la categoría Mayores, que el fin de semana viajará a Santiago para jugar del 13 al 15 de julio el cuadrangular preclasificatorio al Mundial Filipinas-Japón-Indonesia 2023.
«Vamos a hacer todo lo que podamos, vamos a jugar con todo y demostrar que merecemos estar en este certamen. Sé que serán juegos difíciles, sé que hay equipos talentosos, son buenos países y tratarán de ganar. No pensar mucho en ellos, sino mentalizarnos en lo que podamos hacer nosotros», declaró Reaves en el aeropuerto de Cochabamba.
El escolta boliviano-estadounidense salió de Washington el domingo, en compañía de su mamá Liset Bravo, gracias a las gestiones que hizo el empresario y presidente del club Bolívar, Marcelo Claure, que ofreció su ayuda para conseguir un vuelo directo.
«La Federación tiene que despertar, apoyar a sus jugadores, son chicos con mucho talento. Gracias al señor Claure que le compró el pasaje a Josh para que pueda regresar y estamos agradecidos», dijo Bravo.
Durante este tiempo, Reaves sostuvo conversaciones con el entrenador Giovanny Vargas, quien le habló de los cambios en el trato que reciben los basquetbolistas gracias a la participación del Viceministerio de Deportes, Gobierno Municipal de Sacaba, Entel, BoA y el hotel Regina.
Con Reaves, el elenco boliviano cuenta con 13 jugadores para enfrentar el cuadrangular frente a Nicaragua, Paraguay y Chile. De este grupo, los dos primeros obtendrán la clasificación a la siguiente fase preclasificatoria.
Raúl Salvatierra, del Zárate de Argentina, quedó descartado del plantel debido a que debe cumplir compromisos con su equipo por estas fechas y por los protocolos de bioseguridad de la FIBA no llegarían dentro del tiempo necesario.