El Diario
Publicado Lunes, 20 de Diciembre de 2021.
Se cumple una semana de silencio total de Lewis Hamilton, en redes sociales, en su vida deportiva, en su ajetreada agenda reivindicativa: la última comunicación es del 11 de diciembre, al hacer segundo en la clasificación de Abu Dabi. Desde entonces, silencio y dejar de seguir a la cuenta de la F1, significativo. A pie de pista, sin saber bien lo ocurrido ni la tormenta que llegaba, felicitó brevemente al campeón, pero después ni habló en la rueda de prensa oficial tras la carrera (la de las televisiones y prensa) ni fue a la Gala de entrega de premios de la FIA, algo obligado y que le expone a una sanción del nuevo presidente de la FIA, ni charló tras ser nombrado Sir el pasado miércoles en Windsor, por, espada en mano. el Príncipe Carlos. Tampoco su equipo de Extreme E (raids eléctricos), derrotado en por el de Nico Rosberg (irónías del destino) le ha dado pie a una sonrisa pasajera. Lo máximo a lo que se ha llegado es a un reconocimiento de la FIA de que “el título se ha visto deslustrado”, y que iniciará una investigación para que en el futuro esté todo más claro. Poco consuelo. Como es inevitable, se ha disparado la rumorología de una salida prematura del deporte del siete veces campeón del mundo, muy tocado por la derrota en la última carrera, y por la forma, a su juicio, expresado por el equipo, completamente injusta. Esa preocupación por el 44, y que haga un Nico Rosberg (anunció su adiós inesperadamente en diciembre de 2016), tampoco la ha frenado Toto Wolff, estos días.