Las estadísticas de Bolivia frente a Paraguay fueron similares 21% de posesión, 2 remates al arco, es cierto que se empezó ganando gracias a una jugada donde el VAR evidencia una mano sancionable y luego es corroborada por el árbitro y se decreta la pena máxima, pero más allá de las ausencias y de la expulsión, la constante es que nos cuesta mucho jugar en campo contrario, nos es difícil sostener la posesión del balón por la presión del rival, se nos complica mucho generar jugadas de peligro en el área rival, no se animan a finalizar las jugadas que generan, hay muchas licencias defensivas, por eso se registra estadísticas de juego muy pobres y que son expuestas por periodistas de cadenas internacionales de deportes hasta casi con burla hacia nuestra selección. Bolivia tiene mucho que corregir, algunos dirán que cuando se gana todo está bien y cuando se pierde es recién cuando saltan las alarmas y salen a criticar a la selección, el problema es que no se analiza el rendimiento y el desarrollo del partido, solo se analiza el resultado. No se trata de ser pesimistas ni darle palo a la selección cuando cae, pero para alcanzar objetivos no basta tener una jornada heroica y obtener un empate de visitante, jugando a la heroica puedes obtener un resultado positivo alguna vez, pero eso no alcanza para lograr objetivos como ir a un mundial o ganar una Copa América. Claudio Bravo luego del partido contra Bolivia dijo: parafraseando “no es el resultado que esperábamos pero sí jugamos como queríamos, tenemos volumen de juego, atacamos bien por todo el frente de ataque, a veces no entra, pero por cómo estamos jugando de seguro alcanzaremos los resultados que nos hemos propuesto”. Nosotros le empatamos de visitante, les sacamos un punto y ellos perdieron dos, pero en el análisis profundo del partido los chilenos salieron seguros de que iban por buen camino para lograr sus objetivos, nosotros la luchamos con todo pero en el fondo sabíamos de que esa forma de jugar no siempre nos dará los resultados que queremos.
Hay que levantar cabeza que nos quedan tres partidos, seguramente uno más difícil que el otro, pero esto es fútbol y todo puede pasar, como decía Azkargorta: “Yo no les entreno para ganar sino para jugar bien, si jugamos bien seguramente tendremos más posibilidades de ganar”. (Texto: Massur Cuévas)