Nadal venció a Stefanos Tsitisipas, la figura emergente del tenis mundial, reciente campeón en Montecarlo, otro de los feudos de Nadal. El balear sufrió lo incecible para doblegar a un jugador que en dos semanas ha presentado sus credenciales como gran rival en Roland Garros. Venció por 6-4; 6-7 y 7-5. Un gran partido, una gran final y uno de los títulos más sufridos y celebrados por Nadal en su casa del Real Club de Tenis Barcelona 1899. Un partido épico para un gran torneo en el que Nadal fue de menos a más para terminar levantando otra vez el trofeo, su trofeo.