Cuando parecía que el estadio Patria iba a ser escenario del segundo cotejo en jugarse por la primera fecha del Campeonato de la División Profesional, la ilusión de la afición del ´Inde´ se vino abajo con la decisión de los planteles, que provocó una tensión dentro del terreno y que quebró la relación entre los dirigentes sucrense y sus jugadores.
"Cumplimos con el procedimiento, más allá de que no quieran jugar, eso es problema de ellos. Ingresamos a la hora que corresponde para hacer el sorteo, los capitanes se rehusaron", declaró el árbitro Raúl Orosco, quien aclaró este hecho a la presidente de Independiente, Jenny Montaño.
"El partido no se llevó acabo toda vez que ambos equipos no quisieron jugar estando presentes", agregó la autoridad, quien volvió a la cancha para explicar a la dirigente, cuya molestia se pudo ver al momento de hablar con sus futbolistas para que entren en razón.
Los planteles profesionales estuvieron en el terreno, Gualberto Mojica y Martín Prost fueron los portavoces y acordaron no actuar. Después de hacer llamadas, Montaño reunió a su elenco en un lado de la cancha y les pidió que jueguen. (APG)