De profesión profesor y psicólogo, Marcos es un atleta que comenzó tras una dura lesión cuando se dedicaba a la gimnasia artística. Su pasión cambió y ahora es campeón nacional.
“Me dedico hace más de diez años en el fisicoculturismo. Yo empecé producto de una lesión, antes me dedicaba a la gimnasia artística, pero tuve una fractura de peroné, tuve que ir a un gimnasio y me gustó mucho”, contó Quisbert a Deportes El Diario.
Marcos sostiene que este deporte es de tiempo completo, que una preparación seria tiene resultados. ”El fisicoculturismo es un deporte de maratón, que lleva mucho tiempo para los resultado. Esto no se hace en un mes, sino que se llevan años en desarrollarlos, todos los resultados se ven en los eventos”.
Pese a la pandemia, Marcos se preparó para esta competencia. Consiguió el título en la categoría clásico. “Esta preparación la llevé desde que se abrieron los gimnasios, esto por la pandemia. Estuve corrigiendo la alimentación y los entrenamientos, que en su mayoría fueron todos los días. Tenía que preparar toda mi comida desde las 4 de la mañana para luego irme a los entrenamientos. Luego debía ir a mi consultorio”, cuenta.
De este deporte no se vive, es una frase común en el país. En este caso, Quisbert considera que también se invierte, pero se recoge satisfacción más que dinero.
“Es difícil encontrar un patrocinador, imaginen que en el campeonato un bronceador nos cuesta 250 bolivianos, más el vaso dilatador que es 150, esto nos sirve sólo para esa presentación. A veces hay tres, hay que imaginar en solo ese detalle lo que nos cuesta. En Bolivia no se puede vivir del fisicoculturismo, el campeonato nos da medallas, trofeos; y nuestro premio es la satisfacción personal”.
Para Marcos será su primera participación internacional, pero considera que el país es competitivo, que hay atletas que dan la talla fuera del país.
“Será mi primera participación en un sudamericano como atleta, pero vi que Bolivia puede dar competencia. Hay marcadas diferencias, pero no podemos temer en conseguir logros internacionales. Yo me siento totalmente competitivo”, dijo.
“Aprendí de las derrotas, el consejo que puedo dar es que el gimnasio no es sólo para ponerse fuerte, es por salud y un cambio estético, te sube la autoestima. Si alguien quiere competir tiene que tener perseverancia y mentalidad positiva”, cerró como consejo Quisbert, quien tiene 34 años, nació un 28 de julio.
Aprendí de las derrotas, el consejo que puedo dar es que el gimnasio no es sólo para ponerse fuerte, es por salud. MARCOS QUISBERT - CAMPEÓN NACIONAL
APUNTES
SE VA A PARAGUAY
Luego de conseguir el título, Marcos Quisbert partirá a Paraguay para disputar el torneo Sudamericano. Irá con los otros campeones en otras categorías.