El camino hasta el primer puesto ha sido larguísimo y tortuoso. Desde la salida del longevo mánager escocés los diablos rojos entraron en el infierno consumiendo entrenadores -Moyes, Giggs, Van Gaal, Mourinho y Solskjaer-, 1.200 millones de euros en fichajes de dudoso rendimiento, años sin Champions... hasta que sanaron sus heridas. Solski, cuestionado tras la derrota (0-1) ante el Arsenal que dejó al Manu decimoquinto, fue uno de los ejes del equipo.