Aunque ya habían tenido contactos previos en los últimos meses, las conversaciones se habían frenado toda vez que el acuerdo de renovacion de Messi por el Barcelona se dio por hecho desde todos los frentes. La alianza CVC-LaLiga, aceptada en principio por Laporta, era la pieza que ajustaba todo el puzle. Pero, incomprensiblemente, el presidente azulgrana se dejó convencer por su homólogo madridista, Florentino Pérez, a la vez su ‘jefe’ y el de Agnelli como presidente de la fracasada pero aún viva Superliga, para que renunciase a ese dinero de LaLiga aún a costa de perder al mejor jugador de su historia. En paralelo, los galos trabajan también en lograr la renovación de Mbappé, lo que constituiría un colosal golpe de efecto. Pero esta vía no parece tan sencilla. Entre otras cosas por la enorme dificultad que sería cumplir el fair play financiero de UEFA si no cierran varias y millonarias ventas de jugadores.