La peor pesadilla del arquero Unai Simón iba a llegar sobre los 20 minutos. En una jugada de salida desde el fondo que no traía demasiado peligro, Pedri tocó la pelota para el portero. El del Athletic Bilbao falló en el control y la pelota se metió dentro de su propia valla, convirtiéndose en el 1-0. De esa manera, la selección croata se ponía en ventaja sin haber pateado al arco siquiera una vez. El gol le permitió a los subcampeones del mundo adelantarse un poco en la cancha, equilibrar las acciones. En ese lapso, hasta lograron generar situaciones para aumentar la cuenta. Pero esto también le permitió a España encontrar los espacios para llegar al empate. Sobre los 38′, Pedro Sarabia dispuso el 1-1 que le dio algo más de justicia al marcador por lo exhibido hasta el momento.

El complemento iba a traer nuevos aires para los de Luis Enrique, que nunca claudicaron en su búsqueda del arco de enfrente. Croacia siguió mostrando una faceta más apática, a la espera de la propuesta de su rival. El premio al esfuerzo español iba a llegar a los 11′, con el cabezazo goleador de César Azpilicueta luego de un centro de Ferrán Torres que se convirtió en el 2-1.

Unai Simón ganó en confianza luego del error del comienzo y, sobre los 22′, tuvo una aparición clave para quedarse con un remate de Josko Gvardiol que tenía destino de gol. Fue una acción fundamental para conservar la ventaja y luego ir por una nueva conquista para liquidar el pleito: ese tanto llegó e una jugada en la que España encontró a Croacia distraído y Ferrán Torres se escapó por la derecha para avanzar en soledad, ganarle a su marcador en el área y definir para el 3-1. La tensión fue en aumento hasta el final. A cinco minutos para el cierre, Croacia se acercó gracias a un gol de Mislav Orsic que capitalizó un tumulto en el área luego de un centro atrás de Luka Modric. Pero las emociones no iban a terminar ahí: en el segundo minuto de descuento, los de Zlatko Dalic lograron el empate gracias a un cabezazo de Mario Palasic que forzó la prórroga de manera agónica.

En la primera etapa del tiempo suplementario el partido terminó de ganarse el mote del mejor duelo de la Eurocopa hasta el momento. Croacia jugaba mejor, pero Unai Simón salvó una pelota clave en el minuto 95 y, luego de esa jugada, España alcanzó la ventaja. Álvaro Morata, luego de un control exquisito y una definición precisa, marcó el 4-3 y Mikel Oyarzabal aumentó la diferencia tres minutos después. Fue la estocada final para una Croacia que ya no tuvo poder de reacción y que así se despidió del certamen. En la próxima instancia, los de Luis Enrique se medirán ante Suiza. (Infobae)