En Turquía, el City jugará por primera vez la final de la gran competición ante un Chelsea que llega por las nubes tras haber sido muy superior al Real Madrid en semifinales.
Pero en la escena nacional también sobran los desafíos. El City solo necesita una victoria en su estadio contra los Blues o una derrota del Manchester United (2º) ante el Aston Villa (10º) el domingo para ser campeón, mientras que el Chelsea debe sumar en la pelea por finalizar entre los cuatro primeros y asegurar su presencia en la próxima Liga de Campeones. Los jugadores de Thomas Tuchel solo tienen tres puntos de ventaja sobre el West Ham, que recibe al Everton el domingo y cinco sobre el Tottenham, que viaja a Leeds.
El Leicester, tercero con dos puntos de ventaja sobre el Chelsea, abrirá el baile el viernes recibiendo al Newcastle (17º) intentando consolidar su plaza en el podio. En cuanto al Liverpool, séptimo pero con un partido menos tras el aplazamiento de su duelo ante el United en Old Trafford el domingo debido a una invasión del campo por parte de aficionados, jugará una de sus últimas cartas para acercarse a Europa el sábado recibiendo al Southampton.