“Lo estoy haciendo bien, la rehabilitación está progresando paso a paso”, señaló el suizo, que cumplió 40 años en agosto, en un evento celebrado en Zúrich con su patrocinador Mercedes-Benz.
Federer estuvo de baja un año, en el que se sometió a dos cirugías en su rodilla derecha. Regresó esta temporada, pero solo pudo disputar 13 partidos, el último los cuartos de final de Wimbledon. Luego anunció que necesitaba una tercera operación. “Lo peor está detrás, estoy deseando que ocurran cosas. Cuando vuelves de una lesión, cada día es un día mejor, es una época excitante”, continuó.
Federer, ahora noveno jugador mundial, subrayó que su lesión “no era para nada un problema mental”, calificando como “desafío” regresar al circuito profesional.