Por su parte, el elenco dirigido por Ismael Rescalvo, posiblemente- después de anoche- asimiló que el fútbol es el resultado de 90 o más minutos de juego y que las victorias recién se dan cuando este acaba.
Los cruceños llegaron con un esquema bien plantado en la defensa y pese a que en el primer tiempo hubo dominio «aurinegro», la inefectivadad se hizo presente, causando inquietud y hasta nerviosismo.
A los 28 minutos, Jusino generó para el Tigre, con una jugada de pelota larga dirigida a Triverio, que aparentemente habilitó a Arias para que con remate cruzado venza a Quiñones, pero por acción del VAR, el árbitro anuló el tanto, en el entendido de que había fuera de juego, porque Triverio estaba adelantado por milímetros.
A partir de ese momento cambió el juego. En el segundo tiempo, Oriente Petrolero ensayó más llegadas y en The Strongest se ensayó cambios estériles.
Hasta el minuto 70 hubo acciones de ida y vuelta; e incluso se notó a un Viscarra acosado por los intentos de Álvarez y Sánchez.
Los locales quisieron sacar su tradicional garra, pero se les acabó los argumentos ante un rival que cerró su defensa, salió en bloque, por momentos, pero por sobre todo perdió tiempo.
Así concluyó el juego que cambió la cara de la parcialidad paceña que espera una goleada, que nunca se dio.
GHILKA SANABRIA