En los primeros minutos se vio a un conjunto español decidido a presionar bien arriba a su rival para forzar errores en salida y desde allí generar peligro. Estrategia que parecía acertada, pero con el correr del cronómetro se fue apagando y la tónica del partido se pareció más a la que pretendía el campeón de la Champions League.

A los 8 minutos, Manchester City tuvo su primera gran chance en un cabezazo de Aké que obligó a Bono a reaccionar con una volada estupenda para evitar el 1-0. A los 16, nuevamente el arquero marroquí iba a ser clave con una atajada a ante un disparo de media distancia de Jack Grealish, que había logrado encarar de izquierda al centro para rematar al segundo palo.

Parecía que el cuadro de Guardiola se acercaba a la apertura del marcador pero a los 25 minutos, Marcos Acuña pudo trepar por la izquierda y lanzó un centro perfecto para el gran salto de Youssef En-Nesyri, quien le ganó a Josko Gvardiol y metió el frentazo para poner el 1-0 en favor del Sevilla.

Tras el tanto, Manchester City fue con todo al ataque para encontrar el empate pero no lo consiguió en esa primera etapa, pese a los constantes intentos sobre todo por el lado izquierdo con Grealish. Es que el conjunto español pudo contener de manera perfecta tanto a Haaland como a Foden y así dejó si ideas a un equipo de Guardiola que terminó cayendo en los pases largos y centros que no inquietaron demasiado a su rival.

Al segundo tiempo saltaron los mismos 11 de cada equipo y en el arranque nada mas, Sevilla tuvo el segundo. Lucas Ocampos escapó por izquierda a campo libre y asistió al otro lado a Youssef En-Nesyri, que llegó sin marca al área y definió de primera, pero Ederson se lució con su achique y tapada con los pies para evitar el segundo gol.

Parecía que el elenco español estaba cerca de ampliar la ventaja, incluso tuvo varios contragolpes para anotar, pero siempre salló en los metros finales, ante un City estático, falto de creatividad y desordenado en el fondo. Pero, el fútbol no tiene lógica y en ese momento de desconcierto para el equipo de Manchester llegó el 1-1. Fue un centro al segundo palo el que encontró a Cole Palmer, quien metió el frentazo a palo cambiado ante la salida de Bono y gritó la igualdad.

Con el 1-1, se vio lo mejor del campeón de Inglaterra. Palmer, con la confianza por el gol, se volvió indescifrable en cada ataque y Grealish, por el sector izquierdo, hizo añicos la defensa del Sevilla que se dedicó a aguantar las embestidas por las bandas.

Sobre el final, Bono tuvo que transformarse en figura del campeón de la Europa League para evitar el segundo del City que tuvo varias claras, sobre todo en un cabezazo de Aké y en un remate de media distancia de Walker. Además, a falta de seis minutos para el cierre, Guardiola mandó a la cancha a Julián Álvarez en lugar de Palmer.

En los penales, para el conjunto de Manchester marcaron Haaland, Julián Álvarez, Kovacic, Grealish y Walker. Para el Sevilla anotaron Ocampos, Rafa Mir, Rakitic y Montiel, pero Nemanja Gudelj falló el tiro decisivo.

El club inglés, campeón por primera vez en su historia de la Champions League, y el cuadro español, máximo ganador de la Europa League con siete trofeos, se disputan el primer título de la temporada europea 2023/24.

Julián Álvarez fue suplente en el equipo dirigido por el español Pep Guardiola, e ingresó faltando seis minutos. A la hora de los penales, se hizo cargo del segundo y marcó al patear a la izquierda del arquero, quien voló al otro palo. Es el cuarto título para el argentino en el club inglés, a poco de cumplirse un año de su llegada.

En Sevilla, por su parte, fueron titulares Marcos Acuña, Lucas Ocampos, Erik Lamela. Ocampos, justamente, marcó uno de los penales, al igual que Gonzalo Montiel, que había ingresado en el segundo tiempo. También forman parte del plantel, pero no sumaron minutos, Alejandro Gómez y el reciente refuerzo, Federico Gattoni.

Para Guardiola, a su vez, sumó el título número 36 de su carrera y la cuarta Supercopa ya que cosechó dos con el Barcelona y una con Bayern Múnich. De esta manera, se afianza coimo el segundo entrenador más ganador de la historia solamente por detrás de Sir Alex Ferguson, que mantiene la impresionante marca de 49 trofeos. (INFOBAE)