Varios hinchas, sobre todo locales, porque llegaron de varios puntos del país a La Paz, salieron con una gran frustración del estadio Hernando Siles.
Varios mascullaron su bronca, lanzando insultos al entrenador Gustavo Costas y algunos jugadores, entre ellos Adrián Jusino.
De nada valió el esfuerzo de comprar las entradas a precios onerosos y de darse modos para estar en las graderías del estadio Hernando Siles, con un ingreso de terror al escenario miraflorino por la gran desorganización en el momento del acceso, porque hubo personas que se colaron, en el momento donde más imperó el caos antes del partido.
A propósito, hubo denuncias de que en la previa del partido, las colas fueron interminables y nadie daba razón para poder organizar el acceso de mejor manera.
Los hinchas cumplieron, cuando alentaron desde el primer minuto al onceno nacional, cantando a viva voz el himno nacional, pero poco a poco se fueron apagando para terminar frustrados por el resultado.
La mayoría de los aficionados vino a ver a Lionel Messi, quien ni siquiera fue tomado en cuenta por Lionel Scaloni porque tenía una molestia muscular que ya comenzó a padecer ante Ecuador, en el debut en las clasificatorias, pero igual el rendimiento del plantel albiceleste fue notablemente superior a Bolivia.
No obstante, Messi decidió venir a La Paz, se sentó en el banco de suplentes, primero junto a Leandro Paredes, luego con Rodrigo de Paul, sonriendo luego de los tres tantos de la albiceleste. Y. fue uno de los primeros en salir del banco de suplentes con dirección al vestuario, para salirse en comitiva rumbo al aeropuerto para viajar a Miami.
En determinado momento, los aficionados ovacionaron al actual jugador del Inter de Miami, quien estuvo sentado cómodamente en el banco de suplentes.
EL DIARIO