Como consecuencia de esta denuncia, se anunció que todas estas pruebas serán puestas a disposición del Ministerio Público para que por la vía Penal, se sancione a los responsables que serían algunos árbitros, dirigentes y jugadores de fútbol. Asimismo, se denunció que en nuestro territorio estaría operando una red delincuencial internacional con el objetivo de obtener dinero ilícito a costa de los juegos amañados.
De comprobarse esta situación a través de las instancias pertinentes, los responsables serían penados a través del Estatuto de la FBF y de la justicia ordinaria y lo más extremo, sería la suspensión inmediata de los torneos de la División Profesional del Fútbol Boliviano y de la Copa Simón Bolívar.
Con este objetivo, se convocará a un Congreso Extraordinario de la FBF, previa reunión de Consejo Superior de la División Profesional y también en instancias similares de la Copa Simón Bolívar.
«Esta red de corrupción que se instaló en el fútbol boliviano, tendría dos objetivos: beneficiarse económicamente de manera ilícita y dañar la gestión que encabezo(…). Estamos preocupados porque las consecuencias podrían ser severas (de parte de FIFA y CONMEBOL), de comprobarse que los torneos han sido contaminados en cuanto a la transparencia y al fair play», remarcó Costa.
El grupo de abogados de la FBF encanbezado por Gustavo Pérez afirmó que la denuncia está haciendo analizada y «para no contaminar las pruebas, aún no se revelará nombres de personas o entidades involucradas».
GHILKA SANABRIA