En el primer tiempo, Argentina controló la pelota desde el inicio con los ataques de Mariano Gerez, Alejo Sarco y Gonzalo Escudero.
Sin embargo, Fabián Pereira se transformó en figura al atajar varios remates de los ataques argentinos. En una de ellas, el golero supo sacar la pelota cuando su arco había quedado vencido.
Por su parte, Bolivia tuvo tres ocasiones con el delantero César Flores, quien en los mano a mano que tuvo no pudo concretar ante el frente que puso el arquero argentino Froilan Díaz.
Con todo ello, el partido se transformó en muy dinámico, a tal punto que las chances de la Verde eran cercanas para anotar el gol.
En el complemento, Argentina dominó más el partido. Los ataques fueron constantes, siendo posible que no exista reacción de la selección boliviana en los contragolpes.
Fue entonces que Pablo Escobar decidió en colocar a Brarian Mamani y Moisés Paniagua, su arma para atacar; empero, Argentina apeló a su estrella Claudio Etcheverri.
Tuvo que ser Etcheverri quien condujo a Argentina al primer gol. Justo el futbolista de River Plate inició el ataque, la defensa boliviana intentó sacar la pelota a toda costa, pero llegó el disparo de Valentino Acuña que penetró el arco, 1-0, a los 68’.
Tras el tanto, Bolivia intentó reaccionar con los despliegues de Mamani y Paniagua. Todo el ataque provocó que Gustavo Albarracín saliera expulsado por lastimar a Sebastian Altamirano. Argentina se quedó con diez. Pese a los ataques bolivianos sobre el final, el marcador se quedó con el 1-0.