Estos ataques han sido censurados por defensores de los Derechos Humanos, que los consideran «una demostración fehaciente» de quién es el responsable «del Estado de terror» que se vive en el país. «Hay que protegerse también de esas urracas parlanchinas cuyas plumas están llenas de odio, porque rezuman odio. Así los vemos, y así los repudiamos», ha afirmado Murillo en declaraciones al Canal 4 nicaragüense.
«Todos los días inventan cualquier cosa para sembrar terror en la gente (…). Siempre están queriendo instalar temor», ha advertido. «Y nuestro pueblo sabe cómo mienten. Nuestro pueblo sabe cómo son de malignos, de hipócritas, de destructores, de criminales, de terroristas, y terroristas de la comunicación también», ha argumentado.
«Son espacios de destrucción masiva» que «tienen una sola perspectiva, un sólo enfoque imperialista y colonialista y que responden a los intereses y a los designios de los colonialistas y los imperialistas», ha advertido.
Gonzalo Carrión, del Colectivo de Derechos Humanos Nicaragua Nunca Más ha criticado este «atropello al máximo nivel» a la libertad expresión y de prensa en Nicaragua. «Exhibe el carácter inhumano de su régimen», ha remachado Carrión, citado por el portal Confidencial.
Dos periodistas y candidatos presidenciales, Cristiana Chamorro y Miguel Mora, han sido recientemente encarcelados y otros tres, Julio López, Sergio Marín y Carlos Fernando Chamorro han salido del país por miedo a una detención.
Otras Miradas, alianza de medios independientes de Centroamérica y México, ha denunciado también lo que considera «distintas formas de persecución al periodismo de Nicaragua por el Gobierno de (el presidente Daniel) Ortega», y ha recordado que «cada vez es mayor el número de periodistas exiliados».
Hasta 21 políticos y periodistas independientes han sido detenidos en la última oleada represiva, incluidos los precandidatos presidenciales Cristiana Chamorro, Arturo Cruz, Félix Maradiaga, Juan Sebastián Chamorro y Miguel Mora. (Europa Press)