La estampida ocurrió cuando una multitud de aficionados cameruneses intentó entrar a la vez al estadio Olembe, en la capital camerunesa de Yaundé, para ver el encuentro de octavos de final entre los Leones Indomables y la selección de Islas Comoras, una de las revelaciones del torneo.
«Algunos de los heridos están en condiciones desesperadas», dijo Olinga Prudence, una enfermera. «Tendremos que evacuarlos a un hospital especializado», afirmó a medios especializados.
Las informaciones apuntan a que intentaron entrar unos 50.000 aficionados al estadio a la vez, cuando su capacidad máxima era de 60.000 y estaba reducido al aforo del 80% como máximo, esto es, un total de unos 48.000 espectadores.
Paul Biya, gobernador camerunés, afirmó que «el número de fallecidos podría ser más elevado». (Marca)