«La UE deplora la decisión judicial de declarar como extremista al canal Belsat. Es otro ejemplo de la persecución de la libertad de expresión y la libertad de información», señaló la portavoz de Exteriores de la UE, Nabila Massrali, en un apunte en Twitter, en el que ha indicado que el régimen de Lukashenko busca «silenciar todas las voces independientes» en el país.
Un tribunal bielorruso declaró este martes «extremista» al canal Belsat, conocido por su oposición al Gobierno Alexander Lukashenko, una decisión «absurda», en palabras de sus responsables, que solo busca censurar a «todos aquellos que se oponen a la violencia, terror y las elecciones robadas».
«La gente que ahora ostenta el poder en Bielorrusia llama extremistas a todos aquellos que se oponen a la violencia, terror y a las elecciones robadas. Es decir, a la gran mayoría de sus propios ciudadanos», ha reaccionado el subdirector de la cadena, Alyaksei Dzikavitski.
El fallo corresponde al un tribunal de la ciudad de Gomel, en el sureste de Bielorrusia, aunque no ha precisado qué contenidos habrían provocado tal etiqueta. La cadena, con sede en Polonia, así como sus redes sociales quedarán restringidas en suelo bielorruso una vez sea incluida en la lista de «fuentes extremistas» que maneja el Ministerio de Información.
La ley bielorrusa no solo penaliza a los quienes supuestamente elaboran este contenido considerado «extremista», sino también aquellos usuarios que reenvíen información procedente de estas fuentes, con penas administrativas y económicas, e incluso arrestos. (Europa Press)