Ayer el 1-0 fue con una guapeada, como fue en la ida, buscando, empalmando ante el arco rival. Y, en el penal decisivo, la falta le cometió a él el golero «Chula» Salvatierra. Siempre termina fundido, porque deja todo en el campo de juego.
«Contento por el pase, toca descansar y pensar en el partido con Bolívar, pero el Tigre es justo finalista», dijo el atacante atigrado, cada vez más vital en el campo de juego. (Foto APG)