La líder de la oposición bielorrusa, Svetlana Tijanovskaya, anunció la puesta en marcha de la iniciativa, llamada 'Estrategia para la victoria de los bielorrusos', que prevé nuevas protestas a nivel nacional a partir de marzo, entre otras medidas.
Además, trasladó que, para lograr que se lleven a cabo unas nuevas elecciones, representantes del Gobierno bielorruso y de la oposición deben sentarse a negociar a largo plazo "secretamente".
Sin embargo, para que eso ocurra, el Ejecutivo de Lukashenko tiene que estar más debilitado, gracias a acciones como la presión internacional, según la estrategia, que puede leerse 'online'.
Tijanovskaya, que escapó a Lituania, ya abogó el lunes por seguir la lucha en las calles contra el Gobierno de Lukashenko, seis meses después de que el veterano dirigente revalidase su mandato en unas elecciones que no han reconocido ni los movimientos opositores internos ni actores externos como la Unión Europea.
La Comisión Electoral concedió la victoria a Lukashenko al atribuirle más del 80 por ciento de los votos, mientras que Tijanovskaya ni siquiera llegaba al 10 por ciento en los resultados oficiales. La oposición, que denunció fraude, inició entonces las mayores movilizaciones recientes en la exrepública soviética. En diciembre, la ONU estimó que más de 27.000 personas habían sido detenidas desde las elecciones.
Lukashenko permaneció ajeno a las críticas y, después de tomar posesión de su actual mandato en una ceremonia secreta, ha descartado cualquier concesión a la oposición, a la que ha acusado de servir de títeres a las maniobras de intereses extranjeros.
El presidente ha convocado para el 11 y el 12 de febrero una nueva edición de la Asamblea del Pueblo de Bielorrusia, un formato en el que funcionarios, líderes industriales y representantes de la sociedad civil evalúan la situación del país y fijan la 'hoja de ruta' para los próximos cinco años. (Europa Press)