En sus declaraciones, afirmaron haber escuchado una explosión y hallado flotando en el mar los posibles restos de un accidente aéreo que las autoridades aún no han confirmado.
Según mostraron, encontraron cables y lo que parecen restos de una nave, justo en la zona donde se perdió el rastro del avión.
Sin confirmar los hallazgos, las autoridades indonesias sí afirmaron que el Boeing 737-500 de la aerolínea local Sriwijaya Air, que llevaba 62 personas a bordo y con el que se perdió contacto poco después de su despegue de Yakarta este sábado, se pudo haber estrellado en el mar.
“Se perdió el contacto hacia las 14H40 locales (7H40 GMT) con un avión de Sriwijaya, que realizaba el trayecto entre Yakarta y Pontianak (en la isla de Borneo)”, informó el portavoz del ministerio indonesio de Transportes, Adita Irawati. “Hemos enviado a nuestros equipos, así como barcos, a la zona
donde se sospecha que el avión pudo caer tras perder contacto” con la torre de control, afirmó por su parte Bambang Suryo Aji, responsable de la Agencia nacional de búsqueda y rescate.
En el avión viajaban 50 pasajeros, entre ellos diez niños, y 12 miembros de la tripulación, precisó ante la prensa el ministro de Transportes, Budi Karya Sumadi. Este tipo de aparato tiene capacidad para unas 130 personas.
“Tengo a cuatro miembros de mi familia en el avión: mi esposa y mis tres hijos”, declaró, llorando, Yaman Zai, que los esperaba en el aeropuerto de Pontianak.
Este vuelo nacional suele tardar unos 90 minutos. El avión desapareció de los radares poco después de despegar, cuando sobrevolaba el mar de Java.
Según datos del sitio internet FlightRadar24, el aparato alcanzó una altura de 11.000 pies (3.350 metros) antes de caer en picada. Entonces se perdió el contacto con la torre de control. “El vuelo Sriwijaya Air SJ182 perdió más de 10.000 pies (en torno a 3.000 metros) en menos de cuatro minutos tras su despegue de Yakarta”, precisó el sitio aeronáutico en su cuenta oficial Twitter.
En octubre de 2018, 189 personas murieron cuando un Boeing 737 MAX se estrelló en el mar de Java, 12 minutos después del despegue. Este accidente y otro que implicaba el mismo modelo de avión en Etiopía, fueron atribuidos a defectos técnicos y Boeing fue condenado a pagar una multa de 2.500 millones de dólares esta semana por haber engañado a las autoridades en el proceso de aprobación de este modelo.
Los 737 MAX estuvieron sin volar durante 20 meses tras estos dos accidentes que dejaron 346 muertos, antes de ser nuevamente autorizados a operar en algunos países a finales de 2020.
El sector del transporte aéreo en Indonesia ha conocido frecuentes tragedias en los últimos años, y varias compañías aéreas de este país han sido prohibidas en el pasado en Europa y Estados Unidos. En 2014, un avión de la compañía Air Asia que volaba entre la ciudad indonesia de Surabaya y Singapur se estrelló con 162 personas a bordo. Las investigadores llegaron a la conclusión que errores humanos y fallos materiales causaron el accidente. (Infobae)