R oberto Nielsen Reyes, el mejor jinete de la historia de Bolivia, cinco veces campeón nacional de altura con récord de 2.17 metros, recordó con cariño a Julio Zalles Baltazar, a quien preparó para ser el mejor y que hoy en día es el primer y único indígena originario en haberse coronado campeón nacional en Primera Categoría, en la década de los setenta.
Zalles Baltazar falleció la semana pasada en Santa Cruz, causando el pesar de Nielsen Reyes y de la gente que ama el deporte hípico.
Nielsen Reyes fue quien descubrió el talento de su ahijado de bautizo, Julio Zalles, quien fue hijo de Alejo, caballerizo del Club Hípico Internacional Los Centauros.
“Siempre he pensado en Bolivia, por eso desde tierna infancia, he visto que el hijo de mi caballerizo del Centro Ecuestre Internacional Los Centauros de propiedad mía, tenía grandes condiciones para el deporte ecuestre, no me equivoqué”, dijo con profunda amargura el abanderado de Bolivia en los Juegos Olímpicos de Múnich.
Julio Zalles Baltazar es el primer jinete indígena originario en la historia del deporte ecuestre que siendo hijo de un caballerizo logró coronarse campeón.
Roberto Nielsen Reyes fue quien desde tierna infancia lo preparó a Julio Zalles para participar en el deporte ecuestre, hasta lograr que sea campeón nacional en Primera Categoría, montando a un caballo que trajo de Europa, el mismo que se llamaba “Hunters Moon”(Cazador de la luna).
El cinco veces campeón nacional de altura y jinete olímpico logró que Zalles mientras realizaba su servicio militar, como soldado raso gane a los mejores jinetes del país en el Club Hípico Los Sargentos donde se coronó campeón nacional en Primera Categoría.
Nielsen Reyes como su entrenador, es el único –además- que llevó a un jinete indígena originario a los primeros sitiales del deporte ecuestre en Bolivia, y, lo llevó a España donde participó en concursos nacionales de ese país.
El hijo del fallecido Julio Zalles Baltazar, de nombre Mauricio, también ahijado de Nielsen Reyes, sigue los pasos de su padre y se ha iniciado en el deporte ecuestre en el Centro Ecuestre Internacional Los Centauros y hoy en día participa en los concursos en la ciudad de Santa Cruz.
“Tengo una gran pena por la muerte de mi ahijado, a quien como originario y siendo hijo del caballerizo de los Centauros, logré sacarlo campeón en primera categoría, un hecho inédito hasta el día de hoy”, matizó el jinete abanderado de los Juegos Olímpicos de Múnich.
Con emoción, dijo: “le dedico al alma, espíritu, al difunto, una canción en zampoña de Jinetes en el cielo”.
OTROS HITOS
Roberto Nielsen Reyes no solo fue artífice de este hito en el deporte ecuestre con Julio Zalles, porque igual contribuyó a que el jinete Carlos Peña consiga tres medallas en los Juegos Bolivarianos de Cochabamba (una de plata y dos de bronce).
Asimismo, el jinete español Galleguillos con un caballo de Nielsen Reyes llamado “Mi recuerdo” se coronó campeón de España en prueba completa, mientras el también español Javier Salvador montando a “Vikingo”, otro caballo de propiedad de la leyenda del deporte hípico nacional, fue campeón juvenil de Europa.
Nielsen Reyes también prestó sus caballos para que el ejército de Bolivia participe en el campeonato mundial de deportes ecuestres militares, con cuatro caballos de propiedad del histórico jinete, los que permitieron que califique la representación nacional en sexto lugar mundial, en la década de los 70.
No solo facilitó, sino también entrenó a tres oficiales de caballería, quienes tuvieron destacada presentación en este evento mundial y a un costo cero.
Entrenó al equipo de prueba completa de Taiwan para los Juegos Olímpicos de Montreal.
Estos fueron otros de los grandes aportes de Nielsen Reyes al deporte ecuestre, siendo figura emblemática y mentor de deportistas que han cultivado el hipismo, tanto a nivel nacional como internacional.
EL DIARIO