Ambos partidos estuvieron precedidos por un minuto de silencio y los jugadores lucieron brazaletes negros en señal de luto por las ocho personas que murieron el lunes al ser aplastadas por una avalancha humana en los alrededores el estadio Olembé de Yaundé, antes de que Camerún se clasificase para cuartos al vencer 2-1 a Comores.
El miércoles se completarán los cruces de octavos de final con los partidos que disputen las selecciones de Costa de Marfil-Marruecos (del que saldrá el rival de Marruecos) y Mali-Guinea Ecuatorial (que decidirá el adversario de Senegal).