La Organización Mundial de la Salud (OMS) informó más temprano que está en negociaciones avanzadas con Pfizer para incluir su vacuna en la cartera de la agencia para países más pobres.
"Naciones Unidas le pidió a Pfizer (...) que aumentara la capacidad de producción de 1,300 millones de dosis por año a 2,000 millones", dijo Herrera en una entrevista radial.
El presidente Andrés Manuel López Obrador dijo hace unos días que Pfizer, cuya vacuna es la única que se está aplicando en México, iba a realizar entregas semanales al país de al menos 400,000 dosis, como parte de un acuerdo para adquirir 34.4 millones.
El presidente aclaró el lunes que el martes, cuando suelen llegar a las vacunas, se recibiría la mitad de lo previsto. Según dijo Herrera después, hasta "la segunda o la tercera" semana de febrero México no dispondrá de nuevas dosis de esa empresa, pero luego el volumen será de 700,000 por envío.
México, el primer país en comenzar la vacunación en América Latina en diciembre, busca compensar esa reducción del suministro con las vacunas Sputnik V, de Rusia, otra de la firma china CanSino Biologics y una tercera de AstraZeneca.
La rusa, con la que se inmunizarían seis millones de personas, según Herrera, está pendiente de aprobación local; la de CanSino, de la que llegarían 35 millones de vacunas, tampoco fue autorizada aún, y la de AstraZeneca, destinada a 38.7 millones de mexicanos, ya ha sido avalada.
"Nuestros esfuerzos se van a enfocar en tratar de acelerarlas más", dijo el secretario sobre esas negociaciones, al revelar que las autoridades están revisando "los documentos contractuales" de la vacuna rusa. "Si nos dan un par de días más yo creo que ya deberíamos todo listo". (Reuters)