La administración de la prisión indicó que 61 de los 132 presos habían dado positivo y que la mitad de los miembros del personal, 57 personas, también se encontraban contagiadas.
El cierre significa que todas las visitas a la prisión están suspendidas y el patio y el área común de duchas están cerrados.
"Los detenidos reciben comida caliente y productos higiénicos para limpiar su celda", explicó un portavoz de la administración penitenciaria. "Las medidas se evalúan de forma periódica, pero la situación es muy grave", ha reconocido.
Un preso está en el hospital, según ha añadido el propio portavoz este sábado, un mes después, aproximadamente, de la detección del primer caso entre los reclusos. (Europa Press)