El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, adelantó que, en el encuentro con su homólogo ruso, Vladimir Putin, han acordado que si no logran avanzar en la agenda bilateral que han establecido «en tres o seis meses» podrían volver a reunirse. Ha calificado como «productivo» el encuentro, en el que ha llamado a favorecer la cooperación entre ambos países frente al conflicto.
En una rueda de prensa, Biden explicó que durante la reunión ha trasladado a Putin que la agenda de su Administración «no es contra Rusia», sino para defender «al pueblo estadounidense».
En este sentido, el jefe de la Casa Blanca ha indicado que «el tono de la reunión ha sido muy productivo y positivo», a pesar de que hay algunos puntos «en los que no estuvimos de acuerdo».
En relación a los Derechos Humanos, y en referencia al caso del opositor ruso encarcelado Alexei Navalni, Biden ha comunicado a Putin que «no se trata solo de perseguir a Rusia cuando violan los Derechos Humanos, se trata de quiénes somos», por lo que seguirá planteando «cuestiones de libertades fundamentales».
En este sentido, ha advertido de que «las consecuencias» de una hipotética muerte de Navalni «serían terribles para Rusia».
Biden ha confirmado la información que había proporcionado el propio Putin en rueda de prensa tras la cumbre de que los embajadores ruso y estadounidense volverán a sus puestos diplomáticos, después de abandonar Moscú y Washington en abril, tras una batería de sanciones impuestas desde la Casa Blanca.
Los líderes ruso y estadounidense se han reunido este miércoles en la ciudad suiza de Ginebra, un encuentro que se ha extendido durante tres horas y media y que ha tenido lugar en un momento de creciente deterioro de las relaciones bilaterales entre ambos países. La relación entre Washington y Moscú han empeorado en los últimos meses, debido a la situación con Ucrania o el caso de Navalni, entre otros aspectos. (Europa Press)