El proceso estará supervisado por el senador Renan Calheiros, un legislador veterano y crítico de Bolsonaro responsable del informe final. Las decisiones de procedimiento recaerán en el senador Omar Aziz, del duramente golpeado estado de Amazonas y que presidirá el comité, y en el líder de la oposición en el Senado, Randolfe Rodrigues, como vicepresidente.
Se espera que la investigación se centre en los retrasos del gobierno en la obtención de vacunas, incluidos los detalles de las prolongadas negociaciones con los fabricantes de medicamentos extranjeros y los pasos en falso en Amazonas, donde surgió una nueva variante infecciosa a fines del año pasado.
Más allá de los nuevos hechos descubiertos, se espera que la investigación genere un espectáculo político, con los legisladores arrinconando a Bolsonaro contra las cuerdas antes de las tensas elecciones presidenciales del próximo año, donde es casi seguro que busque la reelección.
Aunque la investigación podría sumarse a los pedidos de juicio político contra Bolsonaro, los expertos dicen que es un resultado poco probable. En cambio, sugirieron que el gobierno podría desviar la culpa hacia el exministro de Salud Eduardo Pazuello, quien supervisó el caos en Amazonas y ha sido criticado por las lentas negociaciones sobre vacunas.
Los esfuerzos iniciales de Bolsonaro para socavar el proceso reflejan su potencial para causarle daño. Él y sus aliados se esforzaron por eliminar a Calheiros de la dirección de la pesquisa, alegando que no podía ser imparcial, ya que su hijo es el gobernador del estado de Alagoas, y la investigación analizará la financiación federal de los programas estatales.
Carla Zambelli, legisladora de la Cámara baja y aliada de Bolsonaro, convenció a un tribunal para que bloquee a Calheiros el lunes por la noche, pero la decisión fue revocada más tarde por otra corte federal.
Calheiros dijo el martes que actuará con imparcialidad y que la investigación será "profunda, técnica, centrada en sus objetivos y despolitizada. El país tiene derecho a saber quiénes contribuyeron a las miles de muertes y deben ser castigados". (Reuters)