La tasa anual de inflación al consumidor subió al 6,10% desde el 5,20% de febrero, según la agencia de estadísticas estatal Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE), algo por debajo de la previsión mediana del 6,20% estimada en un sondeo de Reuters a economistas, pero la más elevada desde diciembre de 2016.
El objetivo del banco central para fin de año es el 3,75%, con un margen de error de 1,5 puntos porcentuales en ambas direcciones. Estas cifras muestran que la inflación está bastante por encima incluso del límite máximo del 5,25% de esa horquilla.
Aunque puede que los aumentos en los precios de la energía sean transitorios, las autoridades de política monetaria no querrán que las expectativas inflacionarias se desboquen.
"El banco central está claramente preocupado por una inflación por encima del objetivo y parece probable otra alza de 75 puntos básicos en la tasa Selic, al 3,50%, en la próxima reunión de mayo", dijo William Jackson, economista jefe de mercados emergentes en Capital Economics.
El banco central aprobó el mes pasado su primer aumento en los costos del préstamo desde 2015, elevando la tasa Selic en 75 puntos básicos, al 2,75%.
La inflación mensual se aceleró al 0,93% en marzo desde el 0,86% de febrero, indicó la IBGE, la cota más elevada para cualquier mes de marzo desde 2015 y cerca de la previsión de los economistas de un alza del 1,0%.
Seis de las nueve categorías sondeadas mostraron un aumento de los precios en marzo, con un salto del 3,8% en los costos del transporte, responsables de 0,77 puntos porcentuales del alza mensual total. Dentro del segmento del transporte, los precios del combustible subieron más de un 11% en el mes, dijo el IBGE. (Reuters)