La prohibición a los vuelos de pasajeros, adoptada precisamente en medio de las crecientes preocupaciones por las mutaciones del virus, aparentemente más contagiosas, entrará en vigor este sábado, según ha trasladado el primer ministro de Países Bajos, Mark Rutte.
Por otro lado, el Ejecutivo también planea imponer un toque de queda vespertino, que entraría en vigor este fin de semana y estaría vigente entre las 20.30 horas y las 4.30. En este rango temporal, la ciudadanía sólo podría abandonar sus hogares por razones urgentes, ha precisado Rutte.
Esta constituiría la medida más estricta que se ha impuesto en el país desde que comenzó la pandemia. Otras que evalúan las autoridades incluyen la reducción de los contactos sociales, así que las personas únicamente podrían reunirse con otra persona en el exterior, en vez de con dos como hasta el momento.
Actualmente, en Países Bajos está vigente un confinamiento, impuesto a mediados de diciembre. Bajo esta situación, las tiendas no esenciales, los centros educativos y los restaurantes permanecerán cerrados hasta el 9 de febrero.
El Gobierno de Países Bajos necesitará la aprobación del Parlamento para introducir el toque de queda. El Ejecutivo de Rutte gobierna en funciones, después de que todos los miembros dimitieran la semana pasada por un escándalo relacionado con las ayudas al cuidado de niños.
Hasta el momento, las autoridades sanitarias holandesas han confirmado más de 940.000 casos de la Covid-19, incluidas más de 13.500 víctimas mortales debido a la enfermedad. (Europa Press)